6.ª Entrega (febrero de 2019)
Versión del 15/02/2019
Equipo Real Academia Española
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neurosífilis s. (1912-)
neurosífilis, neuro-sífilis
Etim. Voz tomada del inglés neurosyphilis, atestiguada en esta lengua desde 1878 con el significado de 'infección sifilítica del sistema nervioso central' y esta, a su vez, de neur(o)- y syphilis (véase OED, s. v.).

Se documenta por primera vez, con la acepción 'enfermedad infecciosa del sistema nervioso central derivada de la sífilis', en 1912, en un artículo de J. de Azúa publicado en la Revista Clínica de Madrid; desde entonces se atestigua en textos especializados en medicina hasta la actualidad.

  1. ac. etim.
    s. f. Med. Enfermedad infecciosa del sistema nervioso central derivada de la sífilis.
    Sinónimo: neurolúes
    docs. (1912-2017) 33 ejemplos:
    • 1912 Azúa, J. "Neosalvarsán" [15-07-1912] Revista Clínica de Madrid (Madrid) Esp (HD)
      Es de notar que la tercera inyección ocasionó un intensísimo dolor de cabeza, mucho mayor que los dos anteriores. Por la presentación de la có­fosis después de la tercera, parece poco admisible se tratase de una reacción de Herxheimer, siendo de otro lado difícil admitir un efecto tóxico por acumulación medicamentosa, en cuanto que dos inyecciones posteriores y próximas mejoraron los trastornos auditivos. Lo más razonable es admitir una manifestación de neurosífilís acústica, desarrollada no obstante el tratamiento y curada con la continuación del mismo.
    • 2017 Galindo, J. "Neurosífilis" [01-01-2017] Revista Colombiana de Anestesiología (Bogotá) Co (HD)
      La neurosífilis se describía en la era preantibiótica como una entidad clínica común, que afectaba a un 25-35% de los pacientes con sífilis. No obstante y a pesar de una importante disminución de casos tras la aparición de la penicilina, en el mundo se observó un aumento en la ocurrencia y la presentación de la neurosífilis a partir de las décadas de los ochenta y los noventa, en asociación con infección por el VIH y bajo recuento de linfocitos T CD4 + 8.
    • 1912 Azúa, J. "Neosalvarsán" [15-07-1912] Revista Clínica de Madrid (Madrid) Esp (HD)
      Es de notar que la tercera inyección ocasionó un intensísimo dolor de cabeza, mucho mayor que los dos anteriores. Por la presentación de la có­fosis después de la tercera, parece poco admisible se tratase de una reacción de Herxheimer, siendo de otro lado difícil admitir un efecto tóxico por acumulación medicamentosa, en cuanto que dos inyecciones posteriores y próximas mejoraron los trastornos auditivos. Lo más razonable es admitir una manifestación de neurosífilís acústica, desarrollada no obstante el tratamiento y curada con la continuación del mismo.
    • 1914 Anónimo "Sociedad española dermatología y sifilografía" [20-02-1914] España Médica (Madrid) Esp (HD)
      Impétigo circiforme.- Dr. Azúa. [...] Este es un caso de neuro-sífilis post-salvarsánica, curado con inyecciones de cianuro de mercurio.
    • 1919-1936 Marañón, G. Climaterio [1990] Esp (CDH )
      Pero hoy sabemos que muchos de los casos así diagnosticados son, como también advertíamos al hablar de la menopausia femenina, verdaderos estados de la melancolía climatérica o de los trastornos iniciales de las demencias preseniles, o bien pródromos psíquicos de lesiones esclerósicas o de la neurosífilis, principalmente de la parálisis general.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      No es seguro que la neurosífilis se deba a un treponema especial, neurotropo, distinto del treponema dermatropo, que produce las habituales lesiones cutáneas y mucosas.
    • 1994 Honeyman M., J. / Gmz H., O. Manifestaciones cutáneas 120 Sida Ch (CDH )
      Las manifestaciones clínicas son más graves y se presentan con mayor frecuencia que en el resto de la población, y son: sífilis maligna, neurosífilis y afección ocular.
    • 2009 Plaza, E. Cielo Ar (CORPES)
      Signos de una neurosífilis con varios años de evolución. Bien lo sabía yo. Largas horas nocturnas había pasado mirando y leyendo esos libros de medicina que mi padre escondía en los estantes más altos de su biblioteca. Las enfermedades venéreas y las láminas que las ilustraban me atraían con la curiosidad de lo doblemente prohibido.
    • 2011 Luigi, J. C. et alii "Infecciones transmisión sexual" Primer Consenso Venezolano Ve (CORPES)
      El VDRL en LCR es altamente específico pero poco sensible. El FTA abs en LCR es altamente sensible pero no específico para neurosífilis; un FTA abs negativo ayuda a excluir el diagnóstico de neurosífilis. El diagnóstico de neurosífilis, usualmente se realiza en una combinación de resultados serológicos reactivos, anormalidades del contaje celular o de proteínas del LCR o un VDRL reactivo con o sin manifestaciones clínicas.
    • 2017 Galindo, J. "Neurosífilis" [01-01-2017] Revista Colombiana de Anestesiología (Bogotá) Co (HD)
      La neurosífilis se describía en la era preantibiótica como una entidad clínica común, que afectaba a un 25-35% de los pacientes con sífilis. No obstante y a pesar de una importante disminución de casos tras la aparición de la penicilina, en el mundo se observó un aumento en la ocurrencia y la presentación de la neurosífilis a partir de las décadas de los ochenta y los noventa, en asociación con infección por el VIH y bajo recuento de linfocitos T CD4 + 8.
    • 1912 Azúa, J. "Neosalvarsán" [15-07-1912] Revista Clínica de Madrid (Madrid) Esp (HD)
      Es de notar que la tercera inyección ocasionó un intensísimo dolor de cabeza, mucho mayor que los dos anteriores. Por la presentación de la có­fosis después de la tercera, parece poco admisible se tratase de una reacción de Herxheimer, siendo de otro lado difícil admitir un efecto tóxico por acumulación medicamentosa, en cuanto que dos inyecciones posteriores y próximas mejoraron los trastornos auditivos. Lo más razonable es admitir una manifestación de neurosífilís acústica, desarrollada no obstante el tratamiento y curada con la continuación del mismo.
    • 1912 Azúa, J. "Neosalvarsán (Conclusión)" [01-08-1912] Revista Clínica de Madrid (Madrid) Esp (HD)
      En este caso no puede ser invocada la escasez de medicación que se ha aducido con razón en otros muchos tratados con «606», para explicar las localiziiciones acúsiico-faciales. Según los autores, es regla casi general que la neurosifilis acústica y facial y rar a vez óptica motora, se presente en los pacientes secundarios que han sido tratados con una sola inyección de salvarsan ó con varias muy distanciadas, y mi experiencia con ello está conforme; pero yo añado como factor absolutamente importante, el que se haya hecho ó no tratamiento mercurial conveniente, por su intensidad, después del «606», pues cuando se hace el tratamiento hidrargirico, no hay neurosifilis acústica, facial ú óptica motora, en los plazos habituales en esios casos, aunque la terapéutica con el «606» haya sido muy escasa [...].
    • 1914 Anónimo "Sociedad española dermatología y sifilografía" [20-02-1914] España Médica (Madrid) Esp (HD)
      Impétigo circiforme.- Dr. Azúa. [...] Este es un caso de neuro-sífilis post-salvarsánica, curado con inyecciones de cianuro de mercurio.
    • 1928 Martín Salazar, M. "Malarioterapia" [15-06-1928] Revista de Sanidad Militar (Madrid) Esp (HD)
      Entre todos los descubrimientos de la nueva terapéutica, no hay ninguno que llame tanto la atención como el tratamiento de graves afecciones del sistema nervioso por la inoculación artificial del paludismo. El valor de la terapéutica malárica en la tabes, en la neuro-sífilis y en casos de trombosis cerebral, es digno de fijar la atención de los clínicos.
    • 1932 Rodríguez, H. Enfermedades venéreas [1932] p. 50 Esp (BD)
      En la neurosífilis se presentan las reacciones meníngeas manifiestas por dolores de cabeza o raquialgias o de la espina dorsal, cuyas reacciones se obtienen por la punción lumbar del líquido céfalorraquídeo, y cuyas formas más graves son las meningitis sifilíticas.
    • 1919-1936 Marañón, G. Climaterio [1990] Esp (CDH )

      1.º Cefaleas sintomáticas de enfermedades que nada tienen que ver con la edad crítica, pero que pueden coincidir con ella; por ejemplo, las de una neurosífilis, un tumor encefálico, defectos visuales, focos sépticos, etc.

    • 1919-1936 Marañón, G. Climaterio [1990] Esp (CDH )
      Pero hoy sabemos que muchos de los casos así diagnosticados son, como también advertíamos al hablar de la menopausia femenina, verdaderos estados de la melancolía climatérica o de los trastornos iniciales de las demencias preseniles, o bien pródromos psíquicos de lesiones esclerósicas o de la neurosífilis, principalmente de la parálisis general.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Aparece en el período secundario o en el terciario o en cualquiera de las manifestaciones tardías de la neurosífilis (véase pág. 699).
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      La neurosífilis, la esclerosis en placas, la polineuritis y cualquiera otra enfermedad del sistema nervioso central se acompañan frecuentemente de astenia.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      C) Neurosífilis.– Todas las formas de ésta deben ser investigadas en los casos de melancolía, sobre todo juvenil (v. pág. 699).
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      NEUROSÍFILIS (Semiología de la).– Hasta el hallazgo del treponema de Schaudinn en el sistema nervioso de los tabéticos y paralíticos generalmente, se consideraban estas dos enfermedades como parasifilíticas o metasifilíticas, por oposición a las lesiones meníngeas, vasculares y gomosas del sistema nervioso, directamente sifilíticas.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Hoy se incluyen en un solo título de neurosífilis todas las lesiones producidas por el treponema en el sistema nervioso (parénquima nervioso, meninges o vasos).
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      No es seguro que la neurosífilis se deba a un treponema especial, neurotropo, distinto del treponema dermatropo, que produce las habituales lesiones cutáneas y mucosas.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Seguramente la predisposición individual es más importante que la variedad del treponema: hay familias y razas humanas que raramente presentan lesiones nerviosas sifilíticas; es clásica la observación de las razas del norte de Marruecos, donde la infección sifilítica es abundantísima y rara la neurosífilis; en España la neurosífilis, y especialmente la tabes, es evidentemente menos abundante que en el centro de Europa.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      La neurosífilis se diagnostica en general bien; hay, en gran número de neurosifilíticos, cualquiera que sea su variedad, un aire común, muy típico: individuos maduros, de aspecto sano, con cefalea, trastornos del sueño y del carácter, expresión facial sombría, etc., que orientan rápidamente al clínico experto.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Se comprueban aproximadamente en el 60 por 100 de todos los casos de neurosífilis.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      A) Síntomas comunes a la mayor parte de las neurosífilis: Cefalea (v. página 644).
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Epilepsia, del tipo jacksoniano por meningitis o goma (v. pág. 627); la epilepsia de tipo esencial que algunos atribuyen, en un grupo de casos, a la sífilis, es rara; en 250 epilépticos he estudiado los antecedentes, cuadro clínico y reacciones de la sangre y líquido céfalorraquídeo con sólo un 2,3 por 100 de resultados positivos; y aun en éstos, la mejoría por el tratamiento era nula; sin embargo, hay casos evidentes de neurosífilis con síndrome de epilepsia esencial.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Es evidente la justificación de esta última actitud porque la astenia nerviosa (neurastenia) o psíquica (psicastenia) se presenta como manifestación sintomática predominante en un gran número de afecciones orgánicas: uremia crónica, diversas intoxicaciones exógenas (véase el capítulo Intoxicaciones: pág. 415), insuficiencia suprarrenal, arteriosclerosis, tumores cerebrales, neurosífilis, esclerosis en placas, diversas psicopatías de tipo depresivo, etc. El error de diagnosticar como neurastenia casos de cualquiera de estas enfermedades orgánicas fué, durante muchos años, demasiado frecuente y explica la reacción antineurasténica de los médicos actuales.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Puede significar una intoxicación por la belladona o por la cocaína (v. págs. 420 y 422); ciertas intoxicaciones alimentarias; casos de neurosífilis, de meningoencefalitis; excitación del simpático (por ejemplo durante el terror; epilepsia; manía aguda, catalepsia; traumatismos craneales con conmoción, sin lesión localizada; y tumor craneal).
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      pero en circunstancias patológicas, como el alcoholismo, la toxicosis morfínica o cocaínica, ciertas lesiones nerviosas, como la neurosífilis, o simplemente, la senectud, aparece por períodos la homosexualidad.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      10. Sobre todo, para el diagnóstico estricto de la neurosífilis, en todas sus formas, es conveniente la técnica cuantitativa, empleando dosis progresivas de antígeno.
    • 1976 Barrera Moncada, G. / Kerdel Vegas, O. Adolescente [1987] Ve (CDH )
      la producida por la reserpina en el tratamiento de la hipertensión arterial, en pacientes que toman fenotiazinas en cantidades moderadas o altas, en pacientes con carcinoma del páncreas, enfermedades virales (hepatitis infecciosa, mononucleosis, gripe, fiebre reumática, etc.), tuberculosis, cáncer en general, enfermedades endocrinas (Cushing, Addison), en el síndrome cerebral crónico (arterioesclerosis, demencia senil, neurosífilis, esclerosis múltiple, malnutrición crónica y varias deficiencias vitamínicas), tumores cerebrales, especialmente del lóbulo frontal y temporal, la esquizofrenia.
    • 1991 Ochoa, E. F. L. Preguntas sexo [1993] 189 Esp (CDH )
      Complicaciones neurológicas en pacientes con sida / Infecciones del SNC (gérmenes oportunistas) [...] Papovirus: JC, SV40 (leucoencefalopatía multifocal progresiva) / Otros (aspergilosis, coccidiomicosis, neurosífilis, strongyloides) [...]. /
    • 1991 Alezzandrini, A., ed. Fundamentos Oftalmología [1991] Ar (CDH )
      Otras causas de neuritis retrobulbar son la neurosífilis y el botulismo, que afectan el nervio óptico en forma total (neuritis óptica trasversa).
    • 1991 Alezzandrini, A., ed. Fundamentos Oftalmología [1991] Ar (CDH )
      En un 90 % indica neurosífilis (tabes dorsal, PGP) y sólo en un 10 % procesos no luéticos: encefalitis, esclerosis múltiple, parkinsonismo posencefalítico, traumatismos.
    • 1994 Honeyman M., J. / Gmz H., O. Manifestaciones cutáneas 120 Sida Ch (CDH )
      Las manifestaciones clínicas son más graves y se presentan con mayor frecuencia que en el resto de la población, y son: sífilis maligna, neurosífilis y afección ocular.
    • 1994 Honeyman M., J. / Gmz H., O. Manifestaciones cutáneas Sida Ch (CDH )
      Algunos autores recomiendan una actitud terapéutica más agresiva que consiste en tratar como neurosífilis a todo paciente VIH positivo que esté cursando con una sífilis.
    • 1994 Honeyman M., J. / Gmz H., O. Manifestaciones cutáneas Sida Ch (CDH )
      Esta actitud agresiva se apoya en la rápida progresión a neurosífilis que han presentado algunos pacientes y en la posibilidad que el T. pallidum permanezca latente en algunos órganos como el SNC, ganglios, humor acuoso del ojo, aorta, médula espinar e hígado (ver capítulo 7: Manifestaciones neurológicas).
    • 1994 Pedraza C., L. Manifestaciones neurológicas 91 Sida Ch (CDH )
      En lo paraclínico es básico por ejemplo, la tomografía computarizada de cerebro con y sin contraste en la detección de lesiones expansivas, particularmente la toxoplasmosis en pacientes de mayor riesgo y el estudio citoquímico y VDRL en líquido cefalorraquídeo en la pesquisa de neurosífilis asintomáticas.
    • 2009 Plaza, E. Cielo Ar (CORPES)
      Signos de una neurosífilis con varios años de evolución. Bien lo sabía yo. Largas horas nocturnas había pasado mirando y leyendo esos libros de medicina que mi padre escondía en los estantes más altos de su biblioteca. Las enfermedades venéreas y las láminas que las ilustraban me atraían con la curiosidad de lo doblemente prohibido.
    • 2011 Luigi, J. C. et alii "Infecciones transmisión sexual" Primer Consenso Venezolano Ve (CORPES)
      El VDRL en LCR es altamente específico pero poco sensible. El FTA abs en LCR es altamente sensible pero no específico para neurosífilis; un FTA abs negativo ayuda a excluir el diagnóstico de neurosífilis. El diagnóstico de neurosífilis, usualmente se realiza en una combinación de resultados serológicos reactivos, anormalidades del contaje celular o de proteínas del LCR o un VDRL reactivo con o sin manifestaciones clínicas.
    • 2017 Galindo, J. "Neurosífilis" [01-01-2017] Revista Colombiana de Anestesiología (Bogotá) Co (HD)
      La neurosífilis se describía en la era preantibiótica como una entidad clínica común, que afectaba a un 25-35% de los pacientes con sífilis. No obstante y a pesar de una importante disminución de casos tras la aparición de la penicilina, en el mundo se observó un aumento en la ocurrencia y la presentación de la neurosífilis a partir de las décadas de los ochenta y los noventa, en asociación con infección por el VIH y bajo recuento de linfocitos T CD4 + 8.

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