castrapuercas

Se documenta por primera vez, con la acepción 'instrumento musical de viento de forma trapezoidal consistente en una tablilla de pequeño grosor o en una serie de tubos de diferente longitud que se emplea como reclamo en algunos oficios itinerantes y que produce el efecto de una escala al tocarlo', en 1611, en el Tesoro de la lengua castellana de Covarrubias, al tratar el término castrado. Posteriormente se registra, en 1636, en el León prodigioso de C. Gómez de Tejada y el Diccionario de Autoridades consigna la voz en 1729 y en la primera edición del DRAE (1780) la definición adopta la redacción que, con leves cambios, se mantiene hasta el DLE de 2014. La voz, aunque no de manera muy frecuente, se atestigua hasta la actualidad.

Por otra parte, otras acepciones presentan un carácter exclusivamente lexicográfico. Así en el Vocabularium hispanum, latinum et anglicum (1617) de Minsheu se recoge como "an instrument to geld hogges" (instrumento para castrar cerdos). Por su parte, en A New Spanish and English dictionary (1706) de Stevens figura como "a Sow-gelder" (persona que esteriliza cerdas).