bombardeador

Se documenta por primera vez, en la acepción de 'persona que lanza proyectiles, generalmente explosivos, o bombas [sobre un objetivo]' en 1842, en un artículo del diario El Heraldo (Madrid); con frecuencia se emplea para referirse a oficiales del ejército que ordenaron bombardeos especialmente cruentos. En el mismo año se atestigua el empleo de este vocablo como adjetivo, con el significado 'que lanza proyectiles, generalmente explosivos, o bombas [sobre un objetivo]', en un artículo de La Posdata (Madrid). 

En el Diccionario de peruanismos (1990) de Álvarez Vita se consigna la acepción 'persona que propina golpes muy fuertes'; es probable que en este repertorio se recoja este valor por la amplia difusión de que gozó el sobrenombre de "bombardero" (o "bombardero de Detroit"), con el que se conoció al púgil Joe Louis (como muestra, por ejemplo, el siguiente fragmento de un artículo de La Voz, de Madrid, del 26/07/1936: "Otro elemento que interviene en el poder de pegada del "bombardeador" de Detroit es la perfecta coordinación entre la mente y el músculo").

Se documenta por primera vez, en la acepción de 'aeronave que transporta y lanza bombas' en 1903, en un artículo publicado en El Día (Madrid); su sinónimo bombardero se atestigua desde 1934 también en una crónica bélica publicada en La Vanguardia (Barcelona). En otro ejemplo periodístico del diario Caras y Caretas (Buenos Aires) de 1936 se atestigua el uso de esta voz para referirse a un tipo de escarabajo, si bien es el único testimonio de este uso, frente a la mayor frecuencia de sus sinónimos bombardero (registrado desde 1818, en Paseo por el gabinete de Historia Natural de J. Mieg) y escopetero (a partir de 1863, en el Programa de un curso de Historia natural para los institutos de segunda enseñanza de J. Monlau).