claviarpa

Esta voz, rara y circunscrita al ámbito de la música, se documenta por primera vez, con la acepción 'instrumento musical de cuerda punteada parecido, por su forma, al clave y al arpa', en un documento de 1641, en que se menciona a Juan Hidalgo, a quien se le atribuye la invención y construcción de este instrumento en textos de los siglos XIX y XX, de corte historiográfico. Según indica R. Andrés en su Diccionario de instrumentos musicales, el claviarpa de Hidalgo "hería las cuerdas mediante unos plectros"; los escasos testimonios que hemos podido localizar se deben, probablemente, al escaso éxito del instrumento. Conviene señalar que R. Andrés recoge menciones a instrumentos similares en otras zonas de Europa: "Marin Mersenne (1636) menciona un arpa de procedencia italiana a la que le fue agregado un teclado. Antoine Furetière define con el nombre de consonance una claviarpa, del siguiente modo: "Un grand instrument de musique nouvellement inventé par l'Abbé du Mont, qui participe du clavessin & de la harpe" (Dictionnaire de musique, 1690)" (2009: s. v. claviarpa).

Esta voz, poco frecuente y circunscrita al ámbito de la música, se documenta por vez primera en 1852, en el Diccionario de música de Fargas y Soler; en la mayor parte de los testimonios se menciona a su inventor (J. C. Dietz), así como el escaso uso de que gozó el instrumento. Como indica R. Andrés, J. A. Berger, organista de la catedral de Grenoble, incorporó un nuevo mecanismo al instrumento conocido como desde el siglo XVII como claviarpa (véase claviarpa¹ ), lo que se considera "un antecedente directo del clavi harpe o clavilyr de principios del siglo XIX, que obtuvo cierta incidencia en Francia, Alemania e Inglaterra" (Diccionario de instrumentos musicales, 2009: s. v. claviarpa). Por otra parte, Fétis, en el tercer tomo de su Biographie universelle des Musiciens et Bibliographie générale de la Musique (Bruxelles, Meline, Cans et Compagnie, 1837, pp. 309-310) puntualiza que, si bien la patente data de 1814, el instrumento fue realmente construido por el hijo de Dietz (C. Dietz) y solo apareció en público en la exposición de los productos de la industria, celebrada en el Louvre en 1819.