dactilografiar

Se documenta por primera vez, con la acepción 'escribir [un texto o una melodía] pulsando las teclas de una máquina que imprime caracteres alfanuméricos o musicales en un papel u otro soporte', en 1906, en un artículo anónimo titulado "La máquina de escribir" publicado en en El Papa-Moscas: periódico satírico (Burgos). Como verbo relacionado con la escritura de la música tan solo se ha atestiguado en una ocasión, en 1933, en un artículo titulado "Máquina de escribir música", publicado en la revista Caras y Caretas (Buenos Aires). Con esta acepción se consigna por vez primera en los repertorios lexicográficos en 1917, en el Diccionario de la lengua española, de Alemany. Su sinónimo mecanografiar (véase) cuenta con mayor número de testimonios, sobre todo para el español de España. Con la acepción 'imprimir las líneas epidérmicas de las yemas de los dedos de las manos de una persona con la finalidad de identificarla', se registra en 1907, en la Revista Penitenciaria (Madrid), en un texto en el que se ofrecen instrucciones para realizar correctamente la identificación por medio de las huellas dactilares. La locución verbal sinónima tocar el piano (véase) se atestigua desde 1953.