galapaguear

Se documenta por primera vez, con la acepción 'golpear [a alguien] con un galápago (׀  pieza de madera o metal)', en 1908, en un artículo anónimo publicado en  La Lectura Dominical (Madrid ). En este artículo se relata un suceso ocurrido en la cárcel Modelo en el que un presidiario, en medio de una pelea, golpea a otro con un galápago. El autor se hace eco de la noticia recogida en otros periódicos, y muestra su sorpresa ante el hecho de que no se ponen de acuerdo a la hora de explicar en qué consiste el objeto con el que le golpea un preso al otro, es decir, el galápago (véase, a este respecto el artículo galapagazo ). Como 'cazar galápagos' se registra por vez primera en 1964, en Lexicón de colombianismos  de Alario Di Filipo.

Pichardo consigna este verbo, en 1836, en su  Diccionario provincial de voces cubanas con la acepción 'hacer movimientos precipitados ansiosamente con brazos y piernas para salvarse', dentro de la entrada de gapalear , aunque considera que ese verbo es "una corrupción o mala derivación por galapagar o galapaguear". Por su parte, Alvar Ezquerra, en el Tesoro léxico de las hablas andaluzas de 2000, lo atestigua como 'andar a oscuras'.