estocazo

Se registra por primera vez en 1880 (ligeramente antes que estoconazo, documentada desde 1884), en La Discusión (Madrid), con la acepción de 'estocada profunda y efectiva', circunscrita al dominio de la tauromaquia. El hecho de que en este ejemplo el vocablo aparezca entrecomillado parece indicar que todavía no estaba asentado como término taurino; desde entonces se atestigua hasta la actualidad, siempre en la prensa española, si bien es mucho menos frecuente que estoconazo. El único diccionario que consigna esta voz, en 1942, es el Vocabulario taurino de Cossío, quien registra también por primera vez su sinónimo estoconazo.