tamargo

Diccionario histórico del español de Canarias

tamarco, tamarck, tamargo, tamasco, thamarco

 

tamarco, tamarck, tamargo, tamasco, thamarco. (Voz prehispánica). m. Entre los aborígenes canarios: Vestido de forma tubular, hecho con piel de cabra.

                5-xii-1502 (1959) Colec. Doc. Santo Oficio de Canaria [vol i, fol.lxi v] (p.15): [...] y que tenía debaxo una estera y otra encima y que le paresció como que tenía un tamargo [...]. 21-v-1514 (1965) Acuerdos del Cabildo de Tf iii (15, p.12): [...] e por el dicho Señor Adelantado e por el dicho Licenciado fue acordado que la dicha hordenanza no se entendiese ni estendiese mas de a los guanches que viven en las montañas, que no andan ni se tratan en el vestir y en las otras cosas como castellanos, salvo que andan entamarcados con tamarcos, como solían andar antes que fuesen cristianos [...]. c1552 (1934) Díaz Tanco Triunfo canario (xv, 6): [...] allí son los hombres que comen ceuada/ los asnos açucar que biuen sobre ellos,/ vestidos tamarcos que es miedo de vellos/ biuiendo enterrados con vida cuytada. Ibídem (xxix, 8): Los que allí biuían guardauan su seta,/ contino adorando las frescas verduras,/ y quando casauan trayan vestiduras/ tamarcos de pielles o linda muceta. c1554 (1933) Crónica Lacunense (p.4): [...] y su vestido era tamarcos hechos de cuero sebado, y sus armas eran piedras, y palos tostados, y ellos se llamaban majoreros, era gente amorosa y bien partida, rindieronse con libertad, y fueron christianos [...]. 1590 (1964) Frutuoso As Ilhas Canárias (p.9): Antes disso, não usavam de pão nem de vestido, sòmente se cobriam com peles de animais de cabras, de ovelhas, que havia na terra, cortidas com casca de pinho, cozidas com correias do próprio couro e com sovelas de osso, que aguçavam com as mesmas pedras tubonas; os trajos feitos destas peles chamam tamarcos, e ficava o couro cortido delas á maneira de baio. [(p.92): Antes de ello no usaban pan ni vestido, se cubrían solamente con pieles de cabras y ovejas, curtidas con cáscara de pino, cosidas con correas del propio cuero y con leznas de hueso que aguzaban con las mismas piedras tubonas; los trajes hechos de estas pieles llaman tamarcos y el cuero curtido de ellas como bayo]. Ibídem (p.132): [...] a moça se pôs a chorar; e João Machim a començou afagar, e quanto mais a afagaba, tanto mais ela chorava, dando maiores gritos, o que não sofrendo João Machim (ou seria algum dos seus), deu-lhe uma bofetada á moça, que com seu tamarco de couro vestida estava. [(p.132): [...] la joven se echó a llorar y Juan Machín comenzó a acariciarla, y cuanto más la acariciaba, tanto más ella lloraba y daba mayores gritos, y no sufriéndolo Juan Machín (o acaso alguno de los suyos), diole una bofetada a la joven, que estaba vestida con su tamarco]. 1590 (1959) Torriani Descrittione (p.116): Poi con dece pelli di capra bianche molto ben conce et cusite si uestiuano il busto, e in cima per feraiolo ne portauano il Verno due altre lanute aperte per un lato, che aguisa anco di tabarro era detto Tamarco. [(cap. xxxiv, p.107): Después con algunas pieles de cabras blancas, muy bien preparadas y cosidas, se vestían el busto; y encima, a manera de capa, llevaban en invierno dos más, con su lana, abiertas por un lado, como si fuese una hopalanda, a la cual llamaban tamarco]. h1590-1602 (1977) Abreu Galindo Historia (lib. 1º, cap. x, p.57): Al vestido llamaban tamarco, y al tocado, «guapil»; al calzado, «maho». Ibídem (lib. 2º, cap. iii, p.157): El vestido de los canarios eran unos toneles hechos de juncos majados muy juntos al cuerpo y tejidos que llegaban a la rodilla; y ceñíanlo por la cintura, y después se echaban encima unos pellejos cosidos muy primariamente, que llamaban tamarcos, en verano el pelo afuera, y en ivierno adentro [...]. 1594 (1980) Espinosa Historia (lib. 1º, cap. 6º, p.37): Este género de vestidura llamaron tamarco y era común a hombres y mujeres: salvo que las mujeres, por honestidad, traían debajo del tamarco una como sayas de cuero gamuzado que les cubría los pies, de que tenían mucho cuidado, porque era cosa deshonesta a las mujeres descubrir pechos y pies.

                s.xvii (1978) Gómez Escudero Conquista de Canaria (p.431): Llamaban tamarcos un casaquillo de piel semejante a el zamarrón con que siegan el pan en España, y llamado de todos tamarco. Ibídem (p.434): Tenían maestros para esto, i maestras para las niñas a enseñarles cantares i coser pieles i haser thamarcos, todo a costa del sustento que les daba el Rey. 1603 Cairasco Templo Militante ii (p.74): El trage era de pieles de animales,/ q[ue] llamauan de Tamarco adereçado/ Curiosamente a modo de ropilla. 1604 (1996) Viana Antigvedades (i, fol.13v): Bestian blandas pieles gamuçadas,/ De Cabras de Corderos, y de Ouejas,/ Y con curiosidad y rara industria/ Hazian vn pellico muy pulido/ Amodo de camisa en la hechura,/ Que en su lengua llamaron el Tamarco,/ Era sin cuello, pliegues, y sin mangas,/ Cosido con correas de lo mismo,/ Con pespunte curioso, no de aguja,/ ni alesna, que suplian esta falta/ Grandes espinas de marinos peces,/ Vsauan mas aquesta vestidura/ Los, varones, que siempre las mugeres/ Trayan de lo mismo como saya,/ De la cintura abajo, otro pellico,/ Y tamarco mas corto, que muy justo/ Con mangas les cubria pecho y braços,/ Avia en este trage diferencias/ De villanos, a nobles, hijos dalgo,/ Que los mas principales se vestian/ El Tamarco con mangas, y en las piernas/ Huyrmas, que como medias sin plãtillas/ Trayan, y vn calçado como abarcas,/ Iusto en los pies, que se llaman Xercos. Ibídem (iii, fol.44v): Un Tamarco curioso gamuçado/ De delicadas pieles le vestia,/ A los braços las Huyrmas, como mangas/ Y Guaycas en las piernas, como medias. 1676 Núñez de la Peña Conqvista (lib. i, cap. iv, p.30): Los naturales desta Isla de Thenerife llamauan al vestido Tamarco, y este era hecho de pieles blancas, gamuçadas de cabras, corderos, ò ouejas, à modo de vna camisa sin cuello, ni mangas, ni pliegues, cosianlo con correas del mesmo cuero con sutileza, sin que fuesse necessario abujas para juntarlo; con espinas de pescado, ò puas de palma se remediauan, por no auer otras; era el tamarco por delante abierto, ò por vn lado, para poder sacar ò entrar los braços, al quitarselo, ò ponerlo, y lo abrochauan con correas; este era el trage de los hombres, que llegaua à las rodillas. Los nobles lo traìan con mangas, y en las piernas traìan como medias de cuero sin plantillas, que llamauan Huirmas, y vn calçado à modo de abarcas, que llamauan Xercos; pero el que no era noble (que tambien tuuieron diferencia de nobles, y villanos) traìa el tamarco sin mangas, y las piernas, y pies descalços. El trage de las mugeres era como el de los hombres; pero el tamarco mas corto. 1678 (1994) Sosa Topografía (p.284): Vestiansse los gentiles canarios de tamarcos o samarras que hacian de pieles de animales las quales cortaban muy curiosas y labradas, cosianlas con nervios o correillas que sacaban de las mesmas pieles y las solian teñir de negro o colorado [...]. 1694 (1993) Marín de Cubas Historia (lib. 1º, cap. 20, p.107): [...] el ferreruelo de pieles hasta las corvas, y pintadas, llaman Tamarco. Ibídem (lib. 2º, cap. 11, p.168): [...] venían delante de las andas cuatro capitanes con capotillos de badana llamados tamarcos, braguillas de junco, majos en los pies y guapiletes en la cabeza, y lo demás desnudo.

                primer cuarto s. xviii Relación histórica de las Islas Canarias (pp.79-80): Los grandes eran los que tenían cercano parentezco con la Casa Real, diferenziándose en el uestido, al que llamauan tamarco, que era de pieles de cabra, obejas o corderos, gamuzadas, a la manera de una camiça, que llegaua, en los ombres hasta las rodillas. [...] Las mujeres traían tamarco corto y una saya de pieles, de suerte que no se les biese los pies. 1724 Feuillée Histoire (fol.19): Parmi ces peuples on distinguoit trois differents états, les grands, les nobles et les roturiers. Les grands étoient les princes du sang. Ceux cy portoient un habit auquel on donnoit le nom de Tamarco. Il étoit fait de peau de chevre, de brebis ou de mouton, plié en forme de chemise, il descendoit jusques aux genoux. [...] Les femmes portoit un Tamarco fort court avec un cotillon de peau si long qu'il couvoit entierement leurs pieds. [(p.556): En estos pueblos se distinguían tres clase sociales: los grandes, los nobles y los plebeyos. Los grandes eran los príncipes de sangre real. Estos llevaban un vestido que era llamado tamarco, confeccionado con piel de cabra, de oveja o de carnero, con pliegues y en forma de camisa que llegaba hasta la rodilla. [...] Las mujeres vestían un tamarco muy corto con un zagalejo de piel tan largo que le cubría los pies]. h1770-84 (2007) Quesada Canaria Illustrada (p.304): Armas en sus Defensas. Eran Piedras lanzas de Madera que meneaban con singular destreza y con solo estas dos suertes y la de gruezos Vastones hizieron los Nivarios la[s] defenzas referidas en sus Batallas porq[ue] usando pelear desnudos envo[l]vian en el Braso la Piel o Tamargo con q[ue] se cubrian para resistir alli el golpe de la piedra o baston [...]. Ibídem (p.305): [...] y como en cada Ysla nombraban el vestido con vario Idioma se hallo q[ue] en Tenerife nombravan a las botas o medias Huirmas a las avarcas xercos, y al vestido Tamarco cuio termino tamarco se usa entre las gentes campestres para ponderar lo fuerte de qualquier paño diciendo asi es tan duro y fuerte como un Tamarco [...]. 1772 Viera y Clavijo Historia i (lib. ii, cap. v, p.131): Algunas Dicciones de la Lengua Canaria: [...] Tamarco. Camisa de pieles, ò palmas. Ibídem (lib. ii, cap. v, p.133): Algunas Dicciones de la Lengua de Fuerteventura y Lanzarote: [...] Tamarco. Camisa de pieles. Ibídem (lib. ii, cap. viii, pp. 147-149): Quizá se vestian con mas regularidad en Fuerteventura, porque sus tamarcos, o casaquillas cortas, hechas de las pieles cabrías, y cosidas con correas sutiles, tenian alguna cosa de mas imaginacion, y gusto. [...] Los Gomeros usaban tambien de los mismos tamarcos, de hechura de herreruelos, que les cubrían desde el pescuezo hasta media pierna, y solian teñirlos de encarnado, ó azul con la raiz del arbol Tahinaste, y el jugo de la yerba pastel. [...] Se pudiera decir, que los habitantes de la Gran Canaria, á proporcion, conocieron la ostentacion, y el fausto. Las ropillas, ó toneletes de hojas de palma, y juncos, texidos con industria, y ajustados al cuerpo sin exceder de la rodilla: Los Tamarcos, ò casaquillas de pieles, labrados admirablemente, y teñidos con ciertas tierras coloradas, ó con el jugo de las yerbas, y flores. (En nota: Aunque todos nuestros Antiquarios llamaron Tamarcos estas ropas de pieles, yo entiendo que los verdaderos Tamarcos eran los fabricados de hojas de palma; porque Tamar, que es la raíz de esta voz Tamarco, significa 'Palma' en Fenicio, Arábigo y Hebreo). 1778 Borda-Pingré-Verdun de la Crenne Voyage (i, cap.v, p.83): Ceux de Ténériffe appeloient l'habit Tamarco, les bas Hulemas, & les brodequins Xercos.

                1803 Bory Essais (cap.ii, p.62): Ces morts privilégiés, embaumés et vêtus de leur habit, appelé tamarco, étoient placés sur des planches de bois de pin exhaussées, et la tête tournée du côté du nord. [(p.47): Estos muertos privilegiados, embalsamados y vestidos con un traje llamado tamarco, eran colocados en tablones de madera de pino con la cabeza vuelta hacia el norte]. Ibídem (cap.ii, p.80): Les hommes portaient généralement un manteau nommé tamarco: à Lancerote, il était fait d'une moitié de peau de chèvre préparée, et couvrait simplement les épaules. A Fortaventure, les tamarcos étaient bien plus élégans, plus amples, et en poil très-fin. A Gomère, on les portait encore plus longs; ils allaient du cou au bas des jambes. A Fer, on y ajoutait des manches; ils avaient l'air de petites vestes, et étaient faits de peaux de mouton, dont la laine, tournée en dedans dans la mauvaise saison, l'était en dehors pendant l'été. [(pp.56-57): Generalmente, los hombres llevaban un manto que se llamaba tamarco. En Lanzarote se hacía con la mitad de una piel de cabra y cubría solamente los hombros. En Fuerteventura los tamarcos eran mucho más elegantes, más amplios y con un pelo muy fino. En La Gomera los llevaban aún más largos, desde el cuello hasta la parte baja de las piernas. En El Hierro se les añadía mangas, lo que le daba un aspecto de pequeñas chaquetas, y estaban hechos con pieles de carnero, cuya lana se volvía hacia adentro en invierno y hacia afuera en verano]. Ibídem (cap.ii, p.109): Lorsque le prince, vêtu du tamasco le plus brillant, arrivait dans l'enceinte, les acclamations du peuple s'élevaient de toutes parts. [(p.70): Cuando el príncipe, vestido con su más brillante tamarco, llegaba al recinto, las aclamaciones del pueblo se elevaban por todas partes]. 1842 Berthelot Ethnographie (p.186): De l'ancien langage des habitans de l'Archipel Canarien. Vêtemens et ustensiles. Tamarck, manteau. T[enerife] etc. V[ie]r[a] [Abreu] Gal[indo] Via[na] Tamarco. [(p.122): Del antiguo lenguaje de los habitantes del Archipiélago Canario. Trajes y utensilios. Tamarck, capa. T[enerife] etc. V[ie]r[a] [Abreu] Gal[indo] Via[na] Tamarco]. Ibídem (p.203): On y retrouve plusieurs mots employés généralement dans toutes les îles, savoir: [...] Tamarck, manteau de peau. [(p.141): Se encuentran varias palabras empleadas generalmente en todas las islas, a saber: [...] Tamarck, capa de piel]. c1865 (1996) Álvarez Rixo Voces (tlec iii, p.2549): Tamarco, s.m. voz indíg[ena]. Hoy se dice por irrisión al vestuario o camisón largo que suele sobreponerse la gente pobre para no suciar la ropa interior cuando trabajan. 23-i-1880 Bello Un jardín (p.23): Quiso mostrarme González su pequeño museo de antigüedades canarias, donde no vi sino algunos pedruscos mal labrados y algunos cacharros y trebejos que me hicieron llorar, considerando cuán penosa sería la vida de mis ilustres antepasados los guanches, y cuántos trabajos pasarían para enjergar un simple tamarco de pieles. 23-iii-1880 Berthelot Necesidad (p.51): En el relato de estos aventureros, al hablar del vestido de los indígenas, se encuentra citado varias veces el tamarco ó tamarck, especie de capa tejida con hojas de palmera (tamara). 1880 Pizarroso Vocabulario guanchinesco (p.161): Tamarco, vestido. Equivalencia en árabe: «Labs» ó «Lbas». 1891 Verneau Cinq années de séjour aux Îles Canaries (p.34): Pour parer les coups, les Guanches se servaient de la lance et de boucliers faits d'une rondelle de dragonnier (Dracaena draco); ces boucliers portaient le nom de tarjas. Souvent, ils se contentaient de s'entourer le bras gauche de leur tamarco, sorte de vêtement en peau dont il sera question plus loin. [(p.39): Para evitar los golpes, los guanches se servían de una lanza y de escudos hechos con una rodela de drago (Dracaena draco). Estos escudos tenían el nombre de tarjas. Con frecuencia se limitaban a envolver el brazo izquierdo con su tamarco, una especie de vestido de piel del que hablaré más adelante]. 1894 Millares De la tierra canaria (p.155): [...] le parecía á Cristóbal, sin saber por qué, el tipo perfecto del indígena atlántico, de aquellas mujeres que allá en los comienzos de la historia tejían los tamarcos ó molían el grano, en el obscuro fondo de las cuevas. 1900 (1993) Arribas A través de las Islas Canarias (p.136): [...] debajo de su largo tamarco de pieles (especie de capa) traía un envoltorio de pedazos lanudos de cuero de cabra en forma de una persona [...].

                1906 Pícar La bruja de las Peñuelas (p.43): [...] quemó las pajas de su lecho, derramó la manteca y la leche de sus tabites, hizo girones su tamarco de fiesta, diseminó sus rocallas de alfar y tapió con gruesas piedras la entrada de la cueva. 1912 (1991) Bethencourt Alfonso Historia i (p.145): En esta lucha de exterminio no han muerto en 50 años las voces que oímos de niño. Verdad es que se baten en retirada, que reculan y se hallan más arrinconadas: [...] el eslabón y las cerillas han asesinado a la juápara, como el sombrero al guapilete y la camisa al tamarco de pieles. Ibídem (p.247): Vocabulario guanche. Tamarco, En todas las islas, «camisón o especie de zamarra de pieles». Dos formas. Espinosa. 1919 Manrique Mencey (p.42): En púdicos tamargos ocultan las doncellas/ la pompa de sus carnes divinamente bellas [...]. 1929 (1988) Darias Noticias Hi (p.23): Los bimbaches hablaban un dialecto, aunque diferente al privativo de cada Isla, afín en cuanto a sus terminaciones o afijos y en su espíritu o genio. He aquí algunos de los vocablos catalogados en su Etnografía por Berthelot: [...] tamarco, capa o túnica [...]. a1942 (2001) Crosa Romancero guanche (p.89): ...A empellones, maniatadas,/ al viento sus cabelleras,/ sin tamarcos que velasen/ desnudeces indefensas,/ las tres villanas entraron/ en la fatídica cueva. 1944 (2000) García de Vegueta Islas (p.104): El tamarco de piel gamuzada ciñe las gracias de su cuerpo juvenil sin ocultar los brazos y muslos, melados por el sol de los trópicos. Ibídem (p.139): Todavía se distinguen los poblados aborígenes, y alguna vez cruza los caminos una moza con tamarco de pieles a medio muslo, guapil sobre el cabello y majos o zapatos, atados con trencilla de palmiche a las piernas. 1952 Tarquis Tradiciones (p.10): Mencey se apresuró a decir Aganote yendo a besar el tamarco de Bencomo. 1958 Loynaz Verano en Tf (p.227): Acabada la representación, los niños que hicieron de pastores se despojan pronto de las zaleas que llevaban terciadas a los hombros, a la manera del tamarco guanche; pero los que fingieron de monarcas se resisten a abandonar sus galas reales. Ibídem (p.235): Dulce licor suministraban madroños y mocanes, madera incorruptible el barbuzano, sedosas pieles para los tamarcos, las ovejas sin dueño.

¨Como se comprueba en los primeros ejemplos aquí seleccionados, el término se integró en el recién llegado español precisamente porque el vestido en cuestión continuó usándose por los aborígenes. Una vez desaparecido del vestuario isleño, tamarco queda básicamente como voz referencial del pasado guanche, empleada por historiadores y literatos. Otras aplicaciones que en algunos de los ejemplos se ponen de manifiesto, como es el caso de Álvarez Rixo, no han tenido ningún éxito. Abercromby (p.60) la clasifica entre las «Palabras que parecen inexplicables a través del beréber». Vid.t. Wölfel (pp.617-618).

2. Ubre grande y llena de leche.

                23-v-1882 Bethencourt Alfonso Notas (p.133): Tamarco: denominación que recibe la ubre de las cabras cuando es grande y está lleno (sic).

                1912 (1991) Bethencourt Alfonso Historia i (p.278): Vocabulario guanche. Tamarco, La Gomera, «Llaman por extensión la ubre grande y repleta de leche».

¨Es esta una acepción no señalada por ninguno de los lexicógrafos recopilados en el tlec, ni antes ni después de Bethencourt Alfonso.

3. Cubo de madera o zurrón de cuero usado para sacar agua de los aljibes.

                1900 Bethencourt Alfonso Obras (p.87): Tamargo. Medio zurrón curtido, dispuesto á manera de cubo, para sacar agua etc.

                1912 (1991) Bethencourt Alfonso Historia i (p.255): Vocabulario guanche. Tamargo. El Hierro, «Especie de cubo para sacar agua, hecho con la mitad de un fole con un aro de madera al borde». 1944 Armas Ayala Pequeño vocabulario (p.75): Tamarco.- Balde de cuero o de madera usado antiguamente para sacar el agua de los aljibes de las casas. ([El] Hier[ro]). 1946 Álvarez Delgado Ecero (p.157): Tamarco (y tamargo como dicen otros), según conserva la tradición de su uso hasta época bastante cercana, era un balde o zurrón de cuero con un arco de madera, empleado como cubo o balde para extraer agua de los aljibes y trasportarla.

¨Como indicaba ya Álvarez Delgado es esta una acepción perdida en El Hierro, lo cual refrenda Trapero Pervivencia (p.131).

4. Persona muy gruesa. U.t.c.t. de comp.

                1912 (1991) Bethencourt Alfonso Historia i (p.245): Vocabulario guanche. Tamarco, Tenerife, La Palma, «Además de llevar este nombre una prenda de ropa, se aplica a las personas de alta estatura y de formas groseras». 1946 Álvarez Delgado Ecero (p.157): [...] en El Hierro, aunque el empleo antiguo ha desaparecido, se conserva aún la voz tamarco para indicar una persona, inflada, gorda o contrahecha: «parece un tamarco», con alusión indudable a la forma del antiguo zurrón.

¨Según señala Trapero Pervivencia (p.131), «De nuestros informantes, solo uno (Fernando Gutiérrez) reconoce la palabra tamarco como muy vieja, ya desusada, con el significado 'panzudo, barrigudo', con un sentido despectivo aplicado a los hombres, acorde con la explicación de Álvarez Delgado».

5. Ruido subterráneo fuerte, de origen volcánico.

                1912 Ossuna Impresiones (p.6): Serían las once de la mañana cuando hallándonos á una distancia de 30 metros de la dicha Cruz, dirección n.o., se oyó un ruido fuerte de viento como subterráneo, que produjo cierta impresión de temor á las personas allí reunidas, las cuales se levantaron exclamando ¡un tamarco! ¡un tamarco! A este rumor fuerte como de huracán, que se sintió sin otra manifestación externa y aparente de viento ni en los árboles, ni en el aire, ni en las personas, siguieron, con intérvalos de segundos, tres estruendos que pueden compararse á detonaciones [...]. Ibídem (p.8): Entre las demás expediciones que teníamos en cartera estaba la proyectada al volcán Chinyero, ya para conocer el estado del crater y lavas después de su erupción, ocurrida el 18 de Noviembre de 1909, ya para estudiar en el extenso trayecto que habíamos de recorrer los sitios ó lugares donde tenían efecto las extrañas manifestaciones del fenómeno tamarco, del que ya dejamos hecho mérito. Ibídem (pp.15-16): [...] y son tantas las comunicaciones con el exterior que los metéoros y agentes atmosféricos obran en estas cavidades, lo mismo que las mareas, viniendo á producir los fenómenos del tamarco, incluso la regularidad de las horas en que se verifican, que ha de proceder de causas relacionadas con el movimiento de rotación de la tierra, v.gr., las mareas, ó las brisas de mar y de tierra.

¨No tenemos noticia de que esta acepción se continúe usando en la actualidad, ni parece que tampoco tenga una tradición anterior, a juzgar por su ausencia en los diccionarios.

 

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tamargo

 

tamargo. V. tamarco.

 

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