terebración

Se documenta por primera vez, con la acepción 'perforación del cráneo o de otro hueso con la terebra u otro instrumento quirúrgico', en 1748, en la T raducción de Instituciones chirurgicas y Cirugia completa universal [...] Trabajo, y estudio, en que por mas de quarenta años se empleó el desvelo del Doct. D. Laurencio Heister [...] Tomo segundo, de A. García Vázquez; después se registra en obras de carácter médico, principalmente del siglo XIX. Como 'realización de agujeros efectuada con un instrumento atravesando una cosa por completo o solo en alguna de sus capas' se atestigua únicamente en 1793, en el Manual teórico-práctico de las operaciones de cirugía para instrucción de los alumnos de la escuela de Palma en Mallorca, compuesto por maestros de ella. En 1846 se documenta como 'dolor agudo o intenso parecido al causado por una terebración',  en la traducción de un artículo sobre los efectos terapéuticos del rábano publicado en la Gaceta Homeopática de Madrid (Madrid). Unas décadas después, en 1871, se atestigua con el valor 'incisión practicada en la córnea o en la esclerótica', en un trabajo de  M.  Nunes da Costa sobre el tratamiento de las cataratas, publicado en Anales de la Universidad de Chile (Santiago de Chile). En 1909 se registra como 'agujero que deja en un cuerpo algo que lo penetra o atraviesa', en una noticia de La Correspondencia de España (Madrid) sobre los heridos y muertos de la guerra de Marruecos. Por último, en 1997, se documenta, en un artículo de E. García Sánchez sobre botánicos andalusíes del siglo XII, con la acepción 'realización de injertos con una barrena'. Esta autora explica que fue Catón el primero en utilizar este término referido al injerto de las plantas al utilizar la barrena gálica (terebra gallica), que después fue perfeccionado por Columela.